Todo inicia en 1994, un frió día de invierno, mas
especifico el 11 de junio, un sábado si bien me dijeron. Nace el motivo de esta
biografía…Yo, Matías Ignacio Acuña Gamboa.
Crecí con mi padre, mi madre, mi hermano y de vecinos a mis
abuelos maternos, en una parcela en la Florida con todo lo que un niño pudiese
desear: pasto, arboles, gallinas, mucha tierra y 2 perros. Donde no había día
en que no me aburriese, ya que siempre había algo que hacer.
Todo siguió bien hasta los 9 años, donde por cosas de la
vida mis padres se separaron, creando así un quiebre en mi concepción de
familia y alejándome de mi lugar “seguro”. Paso el tiempo, me cambie de casa, mi
madre y mi padre se volvieron a casar con distintas parejas (coincidentemente
el mismo año) y cada uno me otorgo un hermano.
Me quede con mi madre con la fuerte idea que al terminar el
colegio me iría a vivir con mi padre. Curse prácticamente toda mi básica y
finaliza la media en el colegio Alicante de La florida, me destaque en notas y
comportamiento (hasta me gane el premio de la generación 2012), pero para mí no
era mucho, porque siempre hice lo que hice, no me esforcé demasiado. Por otro
lado la música me apasiona y me seguirá apasionando. Forme algunas bandas, como
una de cumbia con mis profesores del colegio, en donde tocaba la guitarra y
otras con mis amigos, donde cantaba (aunque en mi opinión lo hago horrible).
Ahora estoy en una banda de rock (no sabría que tipo, pero parecido a spinetta)
con mis ex profesores.
Desde ya 2do medio, creo que vida se puso entretenida, los
amigos, las bandas, conocer nuevas cosas, algo de vida amorosa. Pero sin duda
el mejor fue último año. Donde intente hacer todo lo que no hice, como participar
en distinto eventos (que no fueran musicales): debates, presentaciones
teatrales las alianzas, etc.
En el ámbito familiar, lo sobrellevaba con mi hermano,
viendo a mi padre 2 veces al mes y soportando al plomo del esposo de mi madre,
teniendo un amplia familia: 8 abuelos, 4 padres, 5 hermanos (si junto todos de
ambas familias) y un sinfín de tíos y primas. El solo hecho de la separación,
me volvió más autodependiente, me brindo todas las herramientas para poder enfrentar
el mundo, todas les experiencias que eh recolectado en este tiempo de vida me habrán
de servir.
Y como lo dije cuando pequeño, termine el colegio y ahora
vivo con mi padre. Este año ah sido de locos, deje todo lo que conocía, me cambie
de comuna, entre a la u, eh conocido mucha gente (mucha), cambio mi estilo de
vida, pero a pesar de todo, no me
arrepiento de nada y tengo el presentimiento que este año y los que siguen serán
de lo mejor
“Acabo de salir del útero y me doy cuenta que es lo mejor
que me pudo haber pasado”.
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